Muchas de las estrellas que vemos a simple vista son estrellas binarias (dobles) y curiosamente alrededor de estos sistemas con dos soles también se ha descubierto la existencia de planetas, que en algunos casos pudieran ser habitables.
Un nuevo estudio revela que estos planetas que obitan a dos soles también es posible que retengan agua líquida en su superficie durante periodos prolongados, lo que implica que pudieran sustentar ciertas formas de vida.
Las investigaciones permitieron crear modelos que muestran el comportamiento de las órbitas en otro sistema solar denominado como Kepler 35A-B, el cual contiene un planeta ochos veces más grande que la Tierra, pero con dos soles.
Los hallazgos sugieren que la zona habitable en ese sistema solar permite la existencia de agua líquida en la superficie de un planeta a pesar de tratarse de un sistema con dos estrellas, y de las variaciones en las temperaturas de la superficie del planeta.
El estudio demostró que cerca del borde interior de la zona habitable, es decir la más cercana a las dos estrellas, las temperaturas promedios globales se mantendrían estables o casi constantes, permitiendo la existencia de agua líquida.
Se trata de planetas en los que durante el atardecer se aprecian dos soles, una vista exótica que es una realidad en muchos sistemas solares.
Científicos de la Universidad Princeton en New Jersey, y del Instituto de Meteorología Max Planck en Hamburg, Alemania, realizaron el estudio en colaboración con la NASA.